Por su parte el Benfica selló su aparición en los cuartos de final de la UEFA Champions League por segunda temporada consecutiva con una amplia victoria por 5-1 en el partido de vuelta de los octavos de final contra el Club Brugge.

Al igual que en el partido de ida, el Club Brugge tuvo la oportunidad de tomar la delantera en los primeros minutos, pero el capitán visitante Hans Vanaken solo pudo desviar su cabezazo del tentador envío de Casper Nielsen.

El Benfica aumentó la presión y finalmente fue recompensado con dos buenos goles en el espacio de siete minutos justo antes del descanso. Rafa Silva aplicó un hábil remate a centro de Gonçalo Ramos desde la izquierda, antes de que el propio jugador de 21 años entrara en acción. Un buen juego de pies lo ayudó a superar a dos defensores antes de guiar un tiro que superó a Simon Mignolet.

El máximo anotador de las Águilas esta temporada tardó poco más de diez minutos después de la reanudación en anotar otro, desviando un centro raso de Alejandro Grimaldo a la red con un potente remate.

João Mário, a quien le anularon un gol en el segundo minuto por fuera de juego, aprovechó la oportunidad para anotar por quinta vez consecutiva en la UEFA Champions League desde el punto de penalti. Envió fríamente a Mignolet por el camino equivocado después de que el suplente del Benfica, Gilberto, fuera derribado por Abakar Sylla.

Los anfitriones mantuvieron su intensidad y fueron recompensados poco después cuando los reemplazos João Neves y David Neres combinaron, el internacional brasileño anotó un disparo raso al ángulo más alejado desde la izquierda del área.

Los hombres de Scott Parker consiguieron el gol final de la noche, Bjorn Meijer anotó el consuelo con solo tres minutos para el final.