La amenaza de un recorte al subsidio de las universidades públicas es latente, pese a que el mismo presidente de México, Enrique Peña Nieto; el Secretario de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray; y el Secretario de Educación, Aurelio Nuño, han dicho que los recursos para este sector no se verán afectados para el 2016.
Sin embargo, el panorama mundial no es muy halagador, situaciones específicas que afectarán de rebote a México con el aumento constante del dólar, la caída del petróleo, y de manera particular el escándalo millonario por corrupción en el que está envuelta la empresa alemana Volkswagen, son temas que golpeará muy fuerte a la economía nacional, efectos que comenzarán a verse muy pronto.
La advertencia de que puedan darse recortes que podrían afectar a la educación superior pública viene de parte de los diputados federales, quienes en estos momentos analizan la Ley de Ingresos, y que de acuerdo a los números que se presentan con la entrada de dinero a las arcas nacionales, las cifras no les están cuadrando para poder asignar partidas óptimas en los Egresos del 2016.
Los efectos sin duda se deben a la sacudida global financiera que complica el entorno socioeconómico, principalmente de los países tercermundistas, que ante la insuficiencia de recursos públicos, como es el caso de México, le complica hacer frente a esta adversidad.
Para enfrentar este panorama económico, los legisladores federales proponen -de inicio- dar un giro a la propuesta presentada por el Ejecutivo Federal, con el fin de que el Presupuesto Base Cero, se reoriente aún más con el fin de impulsar el gasto público en temas como educación, servicios de salud, combate a la pobreza, y en la generación de más fuentes de empleo con mejores salarios para reactivar la economía interna.
Esto obliga a que el optimismo de los rectores de las universidades públicas federales y estatales que estaba en su pleno apogeo, sea más cauto, ya que la situación podría cambiar sino se toman las medidas pertinentes, pese a que en las reuniones de septiembre que se tuvieron con los secretarios de Hacienda y Crédito Público y de la SEP se aseguró que no habría recorte y que el presupuesto sería mayor al de 2015.
Sin embargo, al inicio de este último trimestre del año las noticias no han sido nada halagadoras para el país, ya que estos agentes externos que están impactando las economías mundiales, incluso a los países del primer mundo, tendrán que ajustarse a este bigban financiero.
Desde que fue presentado el pasado 8 de septiembre el paquete económico a los nuevos legisladores, el panorama para la educación pública no fue bueno, de entrada se dio un recorte de 5 mil 697 millones de pesos, respecto al ejercicio de 2015. Es decir, que de 305 mil 057 millones de pesos que se dieron este año, para el 2016 la partida asignada fue de 299 mil 359 millones.
De acuerdo a los especialistas, los recortes se concentrarán en el gasto de inversión con al menos 3 mil 664 millones de pesos, afectando rubros como con el crecimiento de infraestructura. Se espera que al cierre de este año, Enrique Peña Nieto asigne los 50 mil millones de pesos que anunció durante su tercer informe con la entrega de la primera emisión de un programa de bonos para infraestructura educativa.
Lo cierto es que no hay nada escrito, y el riesgo de un recorte a la educación superior es latente, por lo que instituciones federales como la UNAM que en el papel recibirían 35 mil 061 millones de pesos, un incremento del 4.4%; el IPN que obtendrá 15 mil 436 millones de pesos, un aumento del 3.2%; y la UAM que alcanzaría una partida de 6 mil 602 millones de pesos, un crecimiento del 7.3%, estas propuestas de presupuesto para el 2016 podrían moverse si es que no se toman las medidas pertinentes para enfrentar este panorama económico global.
El mismo caso podría presentarse en las universidades públicas estatales, cuyas sus finanzas estarían en riesgo de un recorte sino no se asume con responsabilidad la asignación de los recursos públicos que el país ejercerá el siguiente año, dando prioridad a un sector que es toral en el avance y en la solución de problemas sociales que se viven en México.
“Con unas leyes justas y una administración eficiente, se consigue aumentar las rentas del reino; con buenas enseñanzas y buenos ejemplos, se conquista el corazón de los súbditos”... Confucio.
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