martes, 20 mayo 2025

Puebla, Pue. México

Inauguran en la UNAM, la Fiesta del Libro y la Rosa 2025

CIUDAD DE MÉXICO.- El rector de la UNAM, Leonardo Lomelí Vanegas, aseguró que en un mundo fragmentado, vertiginoso y muchas veces hostil, leer es una práctica de resistencia y una forma de vivir la condición humana con sentido. Es un hábito que nos conecta con las demás personas, con la dimensión histórica y con aquello que aún no existe.

Nos permite imaginar nuevos universos, tender puentes y acompañar lo que no debe olvidarse, porque constituye una forma de conocimiento que no impone, sino que convoca, abundó al inaugurar la Fiesta del Libro y la Rosa 2025, que lleva por tema Exilio, memorias y reencuentros.

En el Centro Cultural Universitario añadió que leer también es contar con la plena disposición a encontrarse con la otredad. “Por ello, requiere de una hospitalidad sin exigencias y sin fronteras”.

Esa hospitalidad, continuó, es la que cultivamos en esta Fiesta, porque el exilio se manifiesta en lo cotidiano: cuando se rompe algún vínculo, cuando se pierde momentáneamente el sentido de nuestras acciones o cuando el lenguaje se agota. En momentos así, el libro se vuelve refugio: un espacio donde pensar lo esencial y lo que nos une.

El rector Lomelí señaló que la Universidad Nacional no solo forma profesionistas, sino lectores, y ciudadanas y ciudadanos sensatos y conscientes de su entorno. Y es en plataformas como esta donde esa formación se nutre y se enriquece, no en los márgenes, sino en el centro humanista del saber.

Detalló que el eje temático de la Fiesta emerge desde las entrañas del siglo XX, pero interpela de manera directa y urgente una gran cantidad de problemáticas contemporáneas. Nos permite reflexionar sobre el desarraigo, el despojo, la nostalgia que se convierte en acción colectiva y la palabra como posibilidad de renovación.

En ese sentido, México ha sido un país solidario y que abraza a quienes lo necesitan. Y la UNAM, fiel a su compromiso con la justicia y la libertad, ha sido y sigue siendo un puerto seguro para quienes defienden la ciencia, la poesía, la cultura y la verdad.

Así ocurrió durante la Guerra Civil Española con el exilio republicano, con los perseguidos del Cono Sur en los años 60 y 70, y sigue ocurriendo hoy, cuando abrimos nuestras aulas y foros a las ideas libres, responsables y comprometidas, manifestó.

Lomelí Vanegas sostuvo que la Fiesta rememora el pasado para iluminar los desafíos actuales: los exilios impuestos por la violencia, la migración forzada, la pobreza, los conflictos armados, la crisis climática y socioambiental, y la desigualdad estructural. Y, para hacerles frente, reivindicamos también los reencuentros con nuestras raíces y nuestra diversidad.

Mencionó que en esta ocasión se cuenta con la participación de 125 expositores y más de 600 sellos editoriales. Asimismo, se han organizado más de 300 actividades en el Centro Cultural Universitario y en sedes alternas, con una programación plural, diversa e incluyente: presentaciones editoriales, recitales, conferencias magistrales, obras de teatro, talleres, exposiciones, lecturas públicas y conciertos.

En este contexto, el rector destacó la exposición Un cielo sin fronteras. Rosario Castellanos: archivo inédito -inaugurada hace apenas unos días en el Antiguo Colegio de San Ildefonso-, y el homenaje póstumo que se realizará a Hernán Lara Zavala y Julio Trujillo, escritores esenciales de nuestras letras, así como a Mario Vargas Llosa, doctor honoris causa por esta casa de estudios.