CIUDAD DE MÉXICO.- Las figuras de refugio y asilo político son instrumentos jurídicos del derecho nacional e internacional, y manifestaciones profundas del humanismo que caracterizan a la política exterior de México, particularmente con América Latina (AL) y con los pueblos que han enfrentado persecución, guerra, dictaduras o crisis sociales.
Lo anterior, de acuerdo con la subsecretaria de Relaciones Exteriores, responsable de las relaciones bilaterales con naciones de África, Asia-Pacífico, Europa y Medio Oriente, María Teresa Mercado Pérez, quien argumentó:
La historia de asilo tiene una base sólida en el orden jurídico mexicano y está fundamentada en el derecho internacional, en especial en los tratados de los cuales el Estado mexicano es parte.
Detalló que la política en estos ámbitos está cimentada en dos principios constitucionales: el artículo 11, el cual señala que toda persona tiene derecho a buscar y recibir asilo; y el 89, que distingue jurídicamente a este y al refugio.
El primero responde a la persecución que se hace por motivos de raza, religión, grupo social, opiniones políticas o necesidades económicas; mientras que el segundo se concede a personas perseguidas por razones políticas y cuya vida corre peligro, precisó en un videomensaje.
Durante la mesa “Valoración y perspectivas” añadió que en AL la definición se ha ampliado para incluir situaciones como violencia generalizada, conflictos internos, agresión extranjera y violaciones masivas de derechos humanos.
En México, el trámite para el reconocimiento de la condición de refugiado se realiza por vía administrativa a través de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados.
Mercado Pérez aclaró que el asilo político puede otorgarse de manera territorial dentro del país o en representaciones diplomáticas mexicanas en el extranjero, en cuyo caso se denomina asilo diplomático; no constituye injerencia en los asuntos internos de la nación de origen en congruencia con nuestra doctrina extranjera.
Está reconocido expresamente en la Ley sobre Refugiados, Protección Complementaria y Asilo Político; su otorgamiento recae en la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), destacó en el encuentro efectuado en el auditorio Leopoldo Zea, del Centro de Investigaciones sobre América Latina y el Caribe (CIALC) de la UNAM.