- Con penalti inexistente y gol de último minuto, el América venció 2-1 a La Franja
Con un Estadio Ciudad de los Deportes a medio llenar y ante el peor equipo del torneo, las Águilas del América estuvieron a segundos de firmar un bochorno monumental. Pero apareció Ramón Juárez, el canterano consentido de Coapa, para rescatar un triunfo agónico.
La victoria por 2-1 ante Puebla, en el arranque de la Jornada 14, fue más sufrida de lo esperado. El técnico André Jardine tuvo que improvisar, y aunque apostó por Rodrigo Aguirre en la delantera, el uruguayo falló en los momentos clave. Fueron Allan Saint-Maximin y Brian Rodríguez quienes mantuvieron a flote a un América que no encontraba el camino ante la peor defensiva del Apertura 2025.
El primer tiempo fue para el olvido. América monopolizó la posesión, pero careció de profundidad y sorpresa. El Puebla, por su parte, resistía con orden y aprovechó la desesperación local. Al inicio del segundo tiempo, los visitantes sorprendieron con un gol del uruguayo Emiliano Gómez, quien definió cruzado ante Malagón al 52’, tras una desatención defensiva de Israel Reyes.
La tensión crecía en las gradas y también en el campo. Al minuto 67, una jugada polémica cambió el rumbo del partido: el VAR llamó al árbitro Martín Molina por un contacto en el rostro de Brian Rodríguez dentro del área. Tras revisar la acción, el silbante decretó penal y el mismo “Rayito” lo convirtió con gran categoría para el 1-1.
El cierre fue caótico. Faltas duras, reclamos constantes y una expulsión para Raúl Castillo del Puebla tras una plancha sobre Álvaro Fidalgo, nuevamente a instancias del VAR. Hernán Cristante, técnico de los poblanos, estalló en la banca y no paró de lanzar gritos e insultos, visiblemente frustrado por las decisiones arbitrales.
Y cuando todo indicaba que el colero sacaba un valioso punto en el Azteca, vino el milagro azulcrema. Jardine, sin delanteros en la banca, echó mano del defensor Ramón Juárez como recurso desesperado. En la última jugada del encuentro, un centro preciso de Saint-Maximin encontró la cabeza de Juárez, quien firmó el 2-1 definitivo al minuto 90+7.
Cristante se fue del campo haciendo gestos hacia la tribuna local, mientras que los abucheos no cesaban para Kevin Álvarez, blanco de las críticas de la afición americanista.
Con este triunfo, América duerme como segundo de la tabla y mantiene viva la esperanza de alcanzar el liderato. Sin embargo, las formas preocupan. El equipo sigue sin convencer, y la ausencia de sus figuras ofensivas le pasa factura.
