- El piloto mexicano aseguró sentirse escuchado y sin presión en su nueva escudería
Tras sus primeras semanas de trabajo con Cadillac de cara al arranque de la temporada 2026 de la Fórmula 1, Sergio “Checo” Pérez se mostró pleno y motivado con el rumbo que ha tomado su carrera. El mexicano confesó que su llegada a la nueva escudería le ha devuelto la ilusión por el máximo circuito del automovilismo, al sentirse una pieza clave dentro del proyecto.
Checo destacó que más allá del punto de partida, lo fundamental será la capacidad de crecimiento del equipo. “Para mí, es un poco irrelevante dónde empecemos. Es más importante la rapidez con la que podamos progresar. Queremos hacer crecer al equipo desde el día 1 y creo que podremos sorprender a mucha gente”, señaló el tapatío, quien subrayó que uno de los principales objetivos es tener un impacto inmediato en la Fórmula 1.
Pérez también resaltó el ambiente de trabajo que ha encontrado en Cadillac, donde su voz es tomada en cuenta. “Es increíble poder hablar con el equipo. Me he enfocado en algunos aspectos específicos, dándoles orientación. Es fantástico estar en un equipo donde sientes que tienes influencia y puedes pedir ciertas cosas”, explicó, dejando en claro que se siente liberado de la presión que marcó su última etapa en Red Bull.
El piloto mexicano reconoció que el año sabático fue clave para replantear su futuro. Aunque sostuvo conversaciones con otras escuderías, fue el proyecto de Cadillac el que terminó por convencerlo de regresar a la F1. “No lo sentí en su momento, pero necesitaba un descanso. Cuando estás en un deporte como este, siempre piensas en el año siguiente o la carrera próxima, es como estar en piloto automático”.
Checo admitió que su salida forzada del serial le permitió ver el automovilismo desde otra perspectiva. “Cuando te obligan a salir, como me pasó, te das cuenta de mucho y ves al deporte diferente”, afirmó.
Finalmente, el mexicano fue contundente al hablar de su motivación renovada: “Siento que me enamoré de la Fórmula 1 de nuevo. Mis últimos seis meses en Red Bull fueron muy difíciles para mí, en todos los sentidos. Empecé a perder algo de motivación y eso es algo que no puedo permitir, porque la F1 me lo ha dado todo”.
Con una nueva escudería, menos presión y un rol protagónico dentro del proyecto, Checo Pérez encara la recta final de su carrera con la ilusión intacta y el objetivo de ayudar a Cadillac a crecer desde su debut en la Fórmula 1.
