- Las Águilas se quedaron a segundos de la hazaña
En un emocionante y ya considerado clásico universitario, las Águilas de la UPAEP Femenil estuvieron a punto de concretar una remontada heroica ante el Tecnológico de Monterrey, pero terminaron cayendo 65-66 en casa. El encuentro, fue disputado con gran intensidad, y mostró el espíritu competitivo del conjunto poblano, que pese a las dificultades nunca bajó los brazos y luchó hasta el último segundo en busca del triunfo.
Durante el primer cuarto, el Tec Monterrey tomó la delantera con un juego ordenado y efectivo, aprovechando los espacios en defensa de las Águilas para cerrar con ventaja 18-22. UPAEP intentó responder con transiciones rápidas, pero la puntería no estuvo de su lado en los primeros minutos, dejando escapar algunas oportunidades claras que más tarde pesarían en el marcador.
En el segundo periodo, las visitantes aumentaron la presión y ampliaron su ventaja a diez puntos (28-38), capitalizando errores en la salida de balón del conjunto local. A pesar de ello, las Águilas mostraron carácter, con una defensa más compacta y buscando romper el ritmo ofensivo del Tec. Sin embargo, la efectividad desde la línea de tres del equipo regiomontano mantuvo la diferencia al descanso.
El tercer cuarto fue clave para las dirigidas por UPAEP, que ajustaron su estrategia defensiva y comenzaron a recuperar terreno. Con un marcador parcial de 43-55, las poblanas lograron mejorar en el juego interior y empezaron a controlar los rebotes defensivos, aunque todavía les costaba convertir las oportunidades creadas. La intensidad aumentó, y el público se encendió con cada punto que acercaba a las Águilas al marcador rival.
El último periodo fue un espectáculo de garra y corazón por parte de UPAEP. Las locales redujeron la desventaja punto a punto, hasta colocarse a solo una unidad del empate (65-66). En los segundos finales tuvieron la posibilidad de mandar el encuentro a tiempo extra, pero las faltas en la ofensiva rival y el reloj en contra les negaron la oportunidad. El cierre dejó un sabor agridulce: una derrota mínima, pero con la satisfacción de haber competido de tú a tú contra uno de los equipos más fuertes de la liga.
La figura indiscutible del encuentro fue Rebeca Colunga, quien firmó un doble-doble con 22 puntos y 10 rebotes, siendo el motor ofensivo y defensivo de UPAEP. Su liderazgo dentro y fuera de la pintura mantuvo al equipo con vida hasta el último instante. A pesar del resultado, las Águilas demostraron carácter, cohesión y una notable mejora en su juego colectivo. Ahora, el reto será transformar esa entrega en victorias, de cara a los próximos compromisos donde buscarán volver a la senda del triunfo.