De a cuerdo a estudios en México, el 70% de los egresados tienen dificultad para integrarse al mercado laboral, situación que depende de factores económicos y no sólo del ámbito educativo.

     Estos estudios arrojan que el 51% de los jóvenes universitarios tienen empleo de tiempo completo, 17% de tiempo parcial y 19 % no trabaja.

    Los datos los contiene el informe de competencias profesionales en preuniversitarios y universitarios de Iberoamérica, que analiza la relación entre la formación de competencias profesionales que ofrecen las instituciones educativas de nivel superior y medio superior, y las necesidades de los sectores productivos y sociales.

     El estudio realizado por el Instituto de Investigaciones para el Desarrollo de la Educación de la Universidad Iberoamericana, detalla que la mayoría de quienes se han incorporado al mercado laboral opinan que su trabajo coincide en alguna medida con sus estudios universitarios, lo que manifiesta que la educación superior contribuye al desempeño de las personas en el mercado de trabajo; no obstante, entre 10 y 25% declara baja o nula coincidencia entre sus actividades laborales y formación universitaria.

     El estudio indica que desde el  2008, cuando se empezaron a sentir los efectos del mal progreso de la economía mundial, la Ibero tuvo que implementar un programa, que a la fecha mantiene, en el que condonan el pago de una o dos inscripciones, con el fin de que los jóvenes no abandonen sus estudios.

     Explica que en la Iberoamericana no llega ni a 50 el número de estudiantes que tienen un crédito educativo por parte de la institución. “En los padres y los alumnos hay una resistencia muy fuerte a hipotecar su futuro, porque cuestionan quién les garantizará tener trabajo con la remuneración que permita pagar esta beca”.

     La investigación revela las cifras sobre este problema, participaron 400 instituciones de educación superior (172 públicas y 228 privadas); así como 50 rectores y desarrolladores de planes de estudio, además de 100 empleadores de las áreas de manufactura industrial, de servicios y del sector primario.

     De los empleadores destaca que aunque hay disparidad de opiniones al analizar la satisfacción por sector de actividad económica, sólo 51% están satisfechos con la formación de los egresados y 13 % están insatisfechos.