Estudiantes de la carrera de Nutrición de la Universidad del Valle de México Campus Texcoco elaboraron Prote Chap´s, una harina para preparar brownies, que tiene como principal fuente de proteína el chapulín de campo y con la que se busca prevenir y tratar la desnutrición en población infantil de 5 a 14 años de edad en México.
Nadia Rodríguez Lovera y Luisa Nallely Espinoza Rendón, estudiantes de nutrición, señalaron que además de los objetivos enfocados en la salud, se propusieron diseñar un alimento delicioso al paladar y agradable a la vista, para asegurar su aceptación entre los niños.
“Quisimos producir una harina lista para preparar brownies proteicos; elegimos esta presentación pensando en prolongar la vida de anaquel del producto en el supuesto de que la mayor población en riesgo de desnutrición se encuentra en zonas de difícil acceso o marginadas. Para el desarrollo del producto se reunieron ingredientes de calidad. Optamos por chapulines de campo como fuente de proteína, hojas de stevia pulverizadas como endulzante, harina de trigo integral, cocoa sin azúcar y polvo para hornear”, comentaron.
Nadia y Luisa añadieron que realizaron pruebas para determinar las medidas correctas que proporcionaran suficientes nutrientes, buena textura y sabor. De igual manera lograron que la mezcla no requiera más que agua y aceite vegetal para su preparación final, evitando así incrementar el costo.
Al realizar la prueba para verificar el nivel de aceptación de los brownies proteicos, seleccionaron una población de 30 personas, todos ellos estudiantes de la UVM Campus Texcoco, a quienes se les dieron a probar una muestra del producto final de Prote Chap´s. Se les solicitó responder una encuesta para evaluar el brownie. El resultado de la encuesta arrojó que al 66.70% de los 30 encuestados les pareció sabroso.
Las estudiantes, quienes fueron asesoradas por el Mtro. Daniel Alberto Ramírez Flores y presentaron el producto durante el 5º Encuentro Nacional de Nutrición y QFBT en UVM Campus Puebla, comentaron que, desde el punto de vista económico, los chapulines son reconocidos como insectos plaga, sin embargo, son considerados como uno de los alimentos prehispánicos más representativos de la gastronomía mexicana, al que hoy en día se le reconoce su sabor y se valora su aporte nutricional.
A nivel mundial se estima que 35% (3.5 millones) de las muertes de menores de 5 años en todo el mundo ocurre por desnutrición infantil; en México, 7.5% de niños de entre 5 y 14 años de edad sufren desnutrición crónica en la población urbana y la cifra se duplica en las zonas rurales.
Nadia y Luisa señalaron que los insectos desempeñan un papel importante en la alimentación humana ya que son una excelente fuente de proteínas y nutrientes de alta calidad, son ricos en fibra y micronutrientes como cobre, hierro, magnesio, fósforo, manganeso, selenio y zinc, en comparación con la carne y el pescado.
“La composición en aminoácidos de la mayoría de los alimentos con base en insectos resulta mejor que la referencia estándar recomendada por la FAO y la Organización Mundial de la Salud (OMS)”, comentaron.
Las estudiantes manifestaron que en México aún hay mucho por hacer en materia de salud y nutrición, “por ello como estudiantes de Ciencias de la Salud, nos toca involucrarnos en situaciones tan alarmantes como son la obesidad y la desnutrición; la realización de productos que contengan entre sus ingredientes principales insectos, serán una excelente alternativa por sus propiedades nutrimentales para combatir el hambre y la desnutrición”, concluyeron.