banner a1

logo

banner l

- Puebla, Pue. México.

09En los últimos días hemos sido testigos y víctimas de la mala calidad del aire en la zona metropolitana de Puebla. Si bien, se ha desatado una fuerte discusión sobre los orígenes de la misma, la realidad es que es un problema multifactorial. Datos del INEGI revelan que en los últimos 10 años aumentaron más de 50% las emisiones contaminantes por parte de las diversas industrias asentadas en el Valle de Puebla; así como los incendios forestales; la falta de áreas verdes y la deforestación.

Ante este escenario, especialistas del Departamento de Ciencias Sociales de la Universidad Iberoamericana Puebla, pronunciaron ante medios de comunicación una serie de problemáticas sobre la mala calidad del aire que actualmente se tiene en el estado, misma que debe ser atendida tanto por actores públicos, como privados y en corresponsabilidad con la ciudadanía.

Por ello, el Mtro. Juan Luis Hernández Avendaño, director del Departamento de Ciencias Sociales, señaló tres aspectos generales, el primero de ellos fue la Encíclica Laudato Si´ emitida por el Papa Francisco, la cual aborda la crisis ambiental que a su vez es también una crisis social. “Creo que, si queremos solo circunscribir lo ambiental, estaríamos desviando la problemática, así como las soluciones”.

Igualmente, destacó que esta crisis ambiental que hemos estado viviendo desde hace muchos años, incluye un problema económico y carencia de políticas públicas y sociales que contribuyan a disminuir el impacto negativo de esta situación.

Como segundo punto, señaló que el país no puede ni debe estar basado en políticas petroleras ni políticas fósiles, pues esto nos habla de una condición primitiva que no ayuda a tener mejores condiciones de vida. “Desde la Licenciatura en Ciencias Ambientales y Desarrollo Sustentable, apostamos por construir un México post petrolero, con una economía basada en el desarrollo sustentable”.

Finalmente, destacó que la crisis ambiental actual se debe a las acciones de los actores que contaminan, pues 9 de cada 10 lo hacen. “El que contamine suelo, aire y agua tiene que pagar, por ello es fundamental crear una fiscalía verde”, afirmó el Mtro. Hernández Avendaño.

“Los impuestos verdes deberían servir para mitigar la problemática del cambio climático. Tener sociedades más limpias. En este sentido, los tres elementos forman parte de un conjunto de políticas públicas esenciales”.

Por su parte, el académico Mtro. Juan Luis Bolaños Berruecos destacó que, si bien los problemas ambientales son también sociales, ha sido la misma sociedad quien ha establecido mecanismos para resolverlos, los cuales parte de una línea legal: marco regulatorio, que a nivel América Latina y mundial, es el más robusto.

En este sentido, el ambientalista resaltó que las leyes comienzan a bajar las atribuciones que el gobierno debe de atender en esta crisis ambiental, pues a nivel federal deberían estar al pendiente de que la industria petrolera, química, metalúrgica, papelera y cementera, cumplan con lo establecido por las normas ambientales.

En el caso de Puebla, abundó, las autoridades deben de atender los lineamentos y hacerlos cumplir. “En la entidad, sólo el 40% de la industria reporta sus emisiones al Estado; el 60 por ciento no lo hace. Para el caso de Ayuntamientos, a ellos les toca regular a los comercios de servicios” puntualizó el Mtro. Juan Luis Bolaños.

La Mtra. Susana Cruz Ramírez, académica en el Departamento de Ciencias Sociales, abocó su participación en la integralidad de los problemas ambientales que repuntan cada día. “Estamos en un valle que no tiene las complicaciones que la Ciudad de México, sin embargo, tenemos una zona de más de 40 mil hectáreas (Izta-Popo) en donde hemos perdido más del 30 por ciento de su flora y fauna”.

Igualmente, señaló que la falta de áreas verdes en la ciudad ha ido en incremento, pues sólo tenemos 1.5 metros cuadrados por habitante, cuando la OMS marca que debe haber 10 metros cuadrados per cápita. La falta de ello genera lo que llamamos Isla de Calor.

Por último, la Mtra. Claudia Elena García Marañón, coordinadora de la Licenciatura en Ciencias Ambientales y Desarrollo Sustentable, comentó la importancia de ser más conscientes de los costos ambientales. Ante esto, subrayó la urgente necesidad de generar acciones que contrarresten, en la medida de lo posible, esta crisis ambiental.

“Hay aspectos que se van a reflejar en los ámbitos sociales y económicos. Desde la Licenciatura vemos que la complejidad ambiental se debe de abordar de manera multidisciplinar”. Del mismo modo, señaló que es importante que las políticas bajen a los ciudadanos y éstos a su vez, presionen al gobierno para generar acciones que ayuden a generar indicadores y herramientas para medir esta crisis y costo socio-ambiental.

“Tenemos un compromiso como especialistas y requerimos apoyo para realizar investigación conjunta para solucionar este problema que cada vez se torna más complejo” finalizó la Mtra. Claudia García.