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- Puebla, Pue. México.

13ibero01En el marco del arranque del diplomado en Derechos Humanos, Género y Acceso a la Justicia , el Instituto de Derechos Humanos Ignacio Ellacuría (IDHIE), SJ. de la Universidad Iberoamericana Puebla presentó la conferencia Un largo y sinuoso camino: El acceso de las mujeres a la justicia, impartida por Marta W. Torres Falcón.

Durante la presentación, Eduardo García Vázquez, coordinador de proyectos de IDHIE SJ., recalcó la importancia y el compromiso del Instituto hacia las luchas por la justicia social desde diversas trincheras y agradeció a la Dra. Torres Falcón su colaboración en la contribución para cumplir con las metas de la Universidad que están encaminadas a la producción de conocimiento, así como a la creación de trabajos y actividades dentro de comunidades en exclusión.

En lo que respecta a la ponencia, la Doctora en Ciencias Sociales, profesora e investigadora de la Universidad Autónoma Metropolitana Azcapotzalco, Marta Walkiria Torres Falcón, enfocó su participación principalmente en las dificultades que han atravesado las mujeres en el acceso a los derechos humanos.

Igualmente, hizo mención en las minorías que han encontrado obstáculos dentro de las normas y leyes establecidas por los poderes del Estado, como lo son la comunidad LGBTTTI y las sociedades indígenas. Sobre el tema recalcó que no se necesita una educación jurídica para darnos cuenta que el acceso a la justicia sigue siendo una meta inalcanzable.

Asimismo, Torres Falcón compartió fechas importantes para contextualizar la lucha de las mujeres en el acceso a la justicia. “La lucha por la igualdad social, un tema que particularmente se ha convertido en una meta por alcanzar”.

En esta remembranza, Martha Torres mencionó que en los albores del siglo XX casi todos los países europeos reconocieron el voto a la mujer, para el segundo tercio del siglo, casi todos los países americanos hicieron lo propio. “Pese a estos esfuerzos, hubo lugares en donde una mujer no podía votar, en Suiza alcanzaron este derecho hasta 1974”.

En este mismo sentido, la especialista recalcó que pese a que en 1967 México firmó la declaración para la eliminación de todas las formas de discriminación contra las mujeres, la nación estableció dicho principio hasta finales de 1974. “Justo un año antes de la primera Conferencia Internacional de la Mujer celebrada en 1975 y en donde el país fue sede”.

A decir de Walkiria Torres, en los años siguientes se realizaron convenciones y conferencias internacionales, centrando el interés de la mayoría en la violencia contra la mujer y las múltiples formas en la que ésta se manifiesta. Para 1980, durante la segunda Conferencia Internacional, celebrada en Nairobi, surge por primera vez el tema de la violencia sexual. A la par de este en México nace la Asociación Mexicana de Lucha en Contra de la Violencia hacia las Mujeres.

En este recuento, la especialista aclara que es hacia mediados de los años noventa que se comienza a hablar de maltrato doméstico. “De mujeres golpeadas se transita a mujeres maltratadas, para dejar claro que la violencia no es solo física y con ello se demuestra la profundidad de la lucha por parte de las mujeres.”

Es a partir de la década de los noventa que surge el acoso sexual como un tema a tratar y se establecen alianzas con movimientos sociales, medios de comunicación, legisladores, organismos de la sociedad civil y académicos, para hacer frente a este fenómeno.

La especialista de la UAM Azcapotzalco afirmó que es hasta 1994, cuando surge el término feminicidio, tras la aparición de una mujer asesinada en Ciudad Juárez. Al respecto, Torres Falcón destacó que pese a que al principio de este siglo se formuló la Ley General de Acceso de las Mujeres a una Vida Libre de Violencia, ésta más de generar respuesta se volvió una industria en expansión.

Por último, Marta Torres aseguró que a principios de este siglo fue cuando se formuló el término violencia obstétrica, “es ahí donde el destino de cada mujer, en muchas partes del mundo, se ve rebasado y se considera que ser mujer es un sinónimo de ser madre”.

“La violencia persiste y todavía se tiene mucho por hacer, ha habido avances, han surgido alianzas importantes y hemos logrado visualizar la violencia como un problema, pero ésta va en aumento y las mujeres cada vez corren más riesgos”, finalizó la académica de la UAM- Azcapotzalco.