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- Puebla, Pue. México.

Pese a riesgos, a la alza paso de migrantes por México

03padresolalinde01La cifra de migrantes centroamericanos que cruzan el país con la esperanza de llegar a los Estados Unidos ha aumentado entre 20 a 25 por ciento, principalmente se refleja en el paso de mujeres y menores, reveló el director del albergue Hermanos del Camino de Ixtepec, Oaxaca, el jesuita, Alejandro Solalinde Guerra.

     Reveló que en la sierra oaxaqueña las bandas del crimen organizado utilizan  a los migrantes como mercancía humana, ya que esperan el paso de estas personas indefensas para robarles sus pertenencias, secuestrarlos masivamente, pedir rescate económico, venderlos a las redes de trata de personas para prostitución, explotación laboral y tráfico de órganos.

     A pesar de las advertencias los migrantes siguen su camino ya sea a pie o sobre "la bestia", porque su necesidad es más apremiante que los peligros que encuentren en el camino. Muchos de ellos saben que en su paso va a esperarlos la muerte, pero aún así prefieren arriesgarse a quedarse pasivos esperando que la pobreza, marginación y hambre sean sus compañeras.

     En la primera Jornada de Migración y Derechos Humanos que organizó la Universidad Iberoamericana Puebla participó  en el panel "Situación de los Derechos Humanos de los Migrantes y sus Defensores", en donde mencionó que al albergue llegan entre 500 y 600 personas diariamente, que al mes representan  4 a 5 mil personas que encuentran un lugar seguro en el albergue.

     En este lugar son atendidos por los voluntarios de la Casa Hermanos en el Camino, que dirige el padre Solalinde, en donde se les da un techo para asearse, comer, dormir,  se les asesora en cuanto a sus derechos humanos y se les apoya para interponer denuncias ante el ministerio público o la Comisión de Derechos Humanos.

     Resaltó que esta labor no sería posible sin la ayuda de muchas personas que de manera solidaria ofrecen sus servicios gratuitos a este lugar para que los migrantes puedan tener un lugar para descansar y  luego proseguir su camino.

     El Padre Solalinde Guerra, que ha sido amenazado en varias ocasiones por grupos criminales que lucran con el tráfico de personas,  declaró "sé que me va a tocar cualquier día, me queda claro, pero seguiré denunciando las violaciones a los derechos humanos de los migrantes, porque vale la pena".

     Delgado, con lentes y con una humanidad que arrastra la admiración de los jóvenes, el ganador del Premio Paz y Democracia de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, declaró que la situación de violencia extrema que se vive en Michoacán es reflejo de un México bárbaro, por lo que llegó a la conclusión que la gente se ha deshumanizado.

     "Hay una gran impunidad sin distinción de clases sociales, pues al pollero, a los políticos y autoridades corruptas les interesa el dinero, pero no la persona", subrayó.

 

Dialogó con criminales

     El sacerdote jesuita reconoce que el crimen organizado lo ha buscado en diferentes ocasiones y ha dialogado con ellos, recordó que en mayo lo contactó gente del Cartel del Golfo en Estados Unidos y  en fecha reciente otro grupo  en la ciudad de Reynosa.

     Comentó que ha perdido perdón a los Zetas ya que antes de ser victimarios han sido víctimas de una sociedad que no los formó en valores humanos, sino que hubo fallas ya que no se les proporcionó educación, empleo y formación cristiana para no desviar su camino, ya que si se les hubiera dado la atención necesaria  y desterrará la corrupción, no tendríamos el  grave problema de violencia que hoy se tiene.