Al convertir el servicio social y la práctica profesional en asignaturas, la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla ha logrado incrementar en un 300 por ciento su número de convenios con organizaciones del sector público y privado para estos fines, es decir, desde la implementación del Modelo Universitario Minerva (MUM) que impulsó esta modificación, de los 400 convenios que tenía la Institución en 2010, ahora cuenta con mil 500 convenios activos para el desarrollo profesional de los universitarios.

     Patricia Campi Reyes, directora de Servicio Social de la Institución, señaló que con la implementación del MUM en 2009, se buscó la revaloración y el replanteamiento de la importancia del servicio social comunitario y profesionalizante.

     “El enfoque epistemológico que le dieron al MUM tiene la intención de que los alumnos conozcan, ejerzan y difundan sus conocimientos hacia la comunidad como un compromiso que plantea el Artículo Quinto Constitucional y salgan a interaccionar con las empresas”, indicó Campi Reyes.

    Con este cambio de paradigma, el Servicio Social y las Prácticas Profesionales Críticas son ahora asignaturas acreditables pero no cursativas que forman parte de la carga curricular de los estudiantes de cualquier disciplina.

     De acuerdo con Juan Sáenz Rivera, Coordinación de Seguimiento de esta dependencia, organizaciones como el Servicio de Administración Tributaria o los ayuntamientos del estado de Puebla han reconocido el papel de los universitarios cuando éstos realizan su servicio o práctica profesional y aprueban los cambios del sistema que ha generado la Universidad para su gestión. Esto se ve reflejado en el incremento de convenios activos para estos fines.

     La BUAP es una institución pionera en este tipo de enfoques. La Universidad Autónoma de Baja California, después la Autónoma de Nuevo León, la de Guadalajara y la Veracruzana, fueron las primeras instituciones en realizar este tipo modificaciones.