El entrenador Miguel Herrera ha declarado en repetidas ocasiones su deseo de tener un enfrentamiento contra Estados Unidos en la final de la Copa Oro  y El Tri dio un paso hacia el objetivo después de la victoria por 1-0 sobre Costa Rica en los cuartos de final el pasado domingo en MetLife Stadium.

El hecho de que México se colocó a un juego de la final es lo que más importa para Herrera, no importa cómo se logró.

Incluso sin el lesionado delantero Giovani dos Santos, El Tri tuvo amplias oportunidades de anotar, pero no tuvo efectividad a lo largo de un partido brillante.

“Esa ha sido nuestra principal preocupación desde el inicio del torneo, tener efectividad en la definición. Desafortunadamente no hemos podido ser tan eficaces como nos gustaría”, dijo Herrera.

A Herrera le gustó el ajuste de su equipo después de que el seis veces campeón estaba a la defensiva en la primera mitad. Su control de la posesión y oportunidades llegaron tras el descanso.

Pero esas oportunidades no se transformaron en goles. No en el segundo tiempo y en el tiempo extra. Oribe Peralta se perdió una oportunidad en el minuto 51 y Carlos Vela después, falló un par de ocasiones de oro.

“Durante un partido solo hay un cierto número de jugadas para ganar un juego antes de empezar el sufrimiento y empiezas a pensar que si le das a tu rival un descanso, pierdes”, continuó Herrera.

Ahora, Herrera viendo a las semifinales en Atlanta, lo hace con cierta incertidumbre con su alineación. Giovani dos Santos hacia ejercicios de calentamiento, pero no pudo competir el domingo.

“Tendremos que seguir trabajando con Giovani (Dos Santos), ver cómo se siente. Si está al 100 por ciento, entonces no hay duda de que va a ingresar. Si no, entonces no lo hará”, finalizó.